domingo, mayo 06, 2018

Croacia nos roba

Dubrovnik, la antigua Ragusa, tiene un gran parecido con Ibiza, pero es mucho más barato
Atentos a Croacia, porque aparecerá muy frecuentemente cuando tratemos de las deficiencias de Ibiza y de Formentera: de hecho, siguiendo este lema catalanista de “España nos roba” en Ibiza pondremos de moda un “Croacia nos roba”, porque irá asimilando muchas cosas del comercio y de la industria de Ibiza. Da igual que sea falso, lo importante de un eslogan es que cale hondo, porque va destinado a las emociones antes que a la razón.
Bueno, explicado esto, resulta que Netflix ha rodado una película (¿una serie?) con gancho, el mismo impacto que causa Ibiza a quienes la ven por primera vez: alusiones constantes al sexo, alcohol, DJ,s, drogas, brincos, chunda-chunda, coches a velocidades de vértigo... todo ello incrustado con algunas escenas de calas, porque resulta que la filmación se ha realizado en Croacia, pero se titula “Ibiza”. Es decir, estos listos, estafadores de poca monta, nos han robado la energía y han usurpado el nombre de Ibiza para vender mejor su producto. Croacia nos roba, Netflix todavía más.
De todo ello se ha enterado el think-tank de nuestro ministerio de Turismo y ha tocado a arrebato. ¿Y qué ha hecho? Amenaza con demandar a Netflix por haber usado el nombre de nuestra isla. O sea, hace lo mismo que hizo el risueño Pedro Palau cuando se encontró con una situación parecida.
En realidad, enclaustrar en el breve recinto de una sala del Juzgado este asunto es una majadería. No se enteraría nadie. Tampoco se ganaría el caso. Ningún juez creo que siquiera la admita a trámite.
Cualquier cinéfilo sabe que esto es habitual en el cine. Se usa el título Ibiza, Sahara, Australia o NY, pero las escenas se ruedan en otro sitio. De hecho a Ibiza ya nos hizo lo mismo Jane Campion cuando rodó la biografía de la australiana Janet Frame, que pasó largos meses en la Ibiza años 60. ¿Dónde se rodó? En Port de la Selva, así que “Cataluña nos robó” a esta elefante maravillosa.
Vicente Torres presidente, Vicent Torres Benet, quietos parados. Usemos las redes sociales, son más efectivas.